Los hamsters más exóticos están de moda, los vemos como pueblan las tiendas de animales, y como el público amante de estos pequeños roedores lo lleva a casa para disfrutar de su cariñosa y curiosa compañía.

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Hamster enano jugando al escondite

Hace unos años, los únicos hamsters que veíamos corretear en casa eran los sirios, los llamados hamsters dorados, aquellos amarillentos y escurridizos roedores que, en realidad fueron los primeros en ser descubiertos, no sólo por el público europeo y de este país, sino por la misma ciencia.

Con el tiempo, se ha difundido una diversidad creciente de hamsters cada vez más exóticos que han llegado a nuestras latitudes y a las tiendas de animales, cuando sus países de procedencia también abrieron sus fronteras en los últimos años del siglo XX. Son los casos de los hamsters enanos chinos y rusos, la variedad conocida como de Roborovski.

Tanto uno como otro, tanto el hamster enano chino, como el hamster ruso o hamster Roborovski, se parecen físicamente y prácticamente comparten la totalidad de sus costumbres. Vamos a comentarlos, porque tal vez, de estas líneas pueda salir un interés por unos roedores diminutos que son la delicia de los más pequeños de la casa.

Limpios, juguetones, tranquilos y dispuestos a dejarse coger y entregar su confianza a quienes les alimentan y les dan cobijo, sus amigos los humanos.

El hamster enano chino es pequeño, muy pequeño, apenas algo más o algo menos de diez centímetros. El hamster enano chino procede de las estepas del norte de China y Mongolia. Llama la atención por su color ceniciento y por una larga línea de color negro que arranca de entre sus ojos saltones.

Línea que, como todo el pelaje de su cuerpo es abundante y sedoso que le llega a brotar en las patas en los meses más fríos. Esas patas y sus diminutas garras son blancas. Y una novedad, tiene una cola larga, de casi tres centímetros, lo que para un hamster es decir larga, porque es común que en otras variedades sea incluso imperceptible.

Apenas pesan cuarenta gramos y sus crías son diminutas, del orden del gramo y medio de peso como mucho. Sin embargo, al mes de vida, ya pesan la mitad que sus progenitores. Son muy precoces, las crías en algo más de una semana abandonan el nido y en un mes ya son sexualmente maduros y totalmente hamsters adultos en menos de dos meses.

Un dato muy importante, en las tiendas de animales no es posible comprar crías que puedan cuidarse desde muy pequeñas, porque las hembras de hamster enano chino son extaordinariamente agresivas en su celo materno. Muerden y agreden a todo aquel que ose acercarse a su camada.

El hamster enano chino procede de zonas muy frías, con registros termométricos, que, en algunas ocasiones, llegan a alcanzar los 40 grados bajo cero. A pesar de ello, jamás hibernan.

El hamster enano chino consume proteínas de procedencia animal hasta en una tercera parte de su alimentación, pero, en ocasiones, por motivo del frío o del alimento que puede encontrar en su entorno, hasta mucho más de la mitad. Y es que su comida está basada en insectos, en arañas, caracoles de todos los tamaños.

La parte complementaria de su comida vegetal la constituye los guisantes, los tréboles o la tradicional alfalfa que podemos comprar en cualquier tienda de animales. Su entorno doméstico, por llamarlo de alguna forma, son las madrigueras excavadas en el suelo, algunas con ramales y longitudes que pueden rondar los cien metros de punta a punta. Todo un récord para un hamster enano chino.

El hamster enano ruso o hamster Roborovski es también de color grisáceo como el hamster enano chino y tiene unos enormes ojos negros que es consecuencia de su necesidad de habitar entornos oscuros en la tundra rusa y siberiana. El peso también es similar, entorno a los 40 gramos, con escasas diferencias entre ambos sexos. Algo que llama la atención en el hamster enano ruso es su aspecto globoso, que se acentúa cuando necesita encontrar cobijo y abrigo para huir del frío.

El hamster enano ruso tiene una vida muy corta de apenas tres y nunca más de cuatro años, aunque su esperanza de vita habitual de es de dos años y medio como media. La madurez sexual del hmaster enano ruso es tan fulgurante como la del hamster enano chino, entre los 15 y 22 días después de su nacimiento se convierte en adulto con capacidad para procrear.

Si el hamster enano chino tiene siete crías por camada, el hamster enano ruso lo supera con nueve hamster diminutos de no más de dos gramos de peso. Su alimentación es también similar a la de los hamster enanos chinos, insectos, raíces y vegetales. El comportamiento de guardar y atesorar comida está muy relacionado con el hecho de que tampoco hibernen y que, por tanto, necesitan comida para consumir durante los peores meses del invierno en su medio natural.

Los hamster enanos, los animalitos que llegaron del frío.